Silvia de Torres Carbonell sobre ‘Entrepreneurial StrengthsFinder’

Silvia de Torres Carbonell

Directora del Centro de Entrepreneurship IAE Business School, directora de Global Entrepreneurship Monitor y miembro del Board de Endeavor Argentina

Estamos asistiendo a un creciente interés global por el fenómeno emprendedor como germen de actividad empresarial que debe estar en el centro de la agenda política, económica y social. La competitividad de un país o una región depende, en gran medida, de su capacidad de innovar. Los emprendedores innovadores y pragmáticos desempeñan un papel clave en el proceso evolutivo de la humanidad: crean trabajo y generan innovación. De este modo, contribuyen a potenciar la productividad y actúan como catalizadores del crecimiento económico. El emprendimiento implica el descubrimiento, la evaluación y la explotación de oportunidades para introducir nuevos productos o servicios, mercados y procesos.

Las mayores innovaciones han estado y estarán asociadas al fenómeno emprendedor y a la creación de nuevas empresas. El emprendedor es, por tanto, el protagonista de una modificación de la realidad a la que agrega un nuevo valor: percibe o busca una oportunidad y encuentra la manera de transformarla en una realidad exitosa. En las etapas de este proceso creativo intervienen las tres partes clave de una persona: mente, corazón y manos. En la primera emerge la visión mental de una realidad nueva; en la segunda crece la pasión necesaria para encarar una realización inédita con los obstáculos que presenta; y la tercera es la acción ejecutora.

Todos los emprendedores de éxito que he conocido comparten una serie de capacidades: la de formar un equipo emprendedor y construir capital social, la de percibir y buscar oportunidades y elegir las mejores, la de escuchar y modificar el camino sin perder la visión, la de centrarse en el modelo de negocio y en la acción, la de liderar, motivar, distribuir riesgos y delegar, la de innovar y, por último, la de estar alerta e incorporar siempre la tecnología como aliada.

Para finalizar, me gustaría compartir unos consejos básicos sobre las habilidades, capacidades, actitudes y aptitudes que debe reunir un emprendedor:

Formar un equipo de trabajo sólido.
Hacer una buena planificación.
Identificar la verdadera ventaja competitiva.
Conocer y no subestimar a la competencia.
Aprovechar las ventajas de la tecnología.
Entablar alianzas y relaciones de cooperación.
Estar siempre informado sobre las tendencias del mercado y las novedades del sector.
No enamorarse de las ideas, sino pasarlas siempre por el tamiz de las oportunidades.
Analizar siempre el mercado, el perfil de los clientes y sus necesidades.
Definir el modelo de negocio para identificar la oportunidad.
Considerar todos los recursos que serán necesarios para llevar adelante el emprendimiento.
No quedarse corto con el cálculo de la necesidad de fondos.
Concentrarse en la implementación y establecer procesos.
Aprender de las experiencias de empresas similares en otros países.
Suplir la inexperiencia con consejo y ayuda profesional.
Analizar y medir los problemas y riesgos que pueden aparecer y tener planes alternativos.

• Y, finalmente, animarse.